Como hemos hecho referencia en otras entradas, enseñar español a niños es una tarea muy enriquecedora, de la que es difícil determinar quién aprende más, si el niño o su profesor.
Este desafío nos obliga a reflexionar muy bien sobre las actividades que desarrollaremos en clase.
El niño aprende a través de las experiencias, es así que se requiere de recursos para experimentar y realizar un aprendizaje significativo. Estas herramientas o materiales educativos cumplen la función de provocar que los niños comenten, experimenten, deduzcan, hagan hipótesis, escuchen, dibujen escriban, etc. Su importancia radica en que enriquezcan sus vivencias, desarrollen su pensamiento, favorezcan la comunicación, motiven sus ganas de conocer.
Métodologicamente se trata de provocar situaciones comunicativas adaptadas a las necesidades de los niños, con un lenguaje auténtico, propiciando la interacción oral y la adquisición de estrategias para aprender.
Para favorecer el desarrollo de la competencia comunicativa necesitamos desarrollar en forma paralela e integrada dos tipos de conocimientos:
Formal, saber cosas de la lengua
Instrumental, saber hacer cosas con la lengua
En otras palabras, un enfoque centrado en la acción, en la concepción constructivista del aprendizaje, teniendo al alumno como agente de su propio aprendizaje y el aula como un contexto rico de oportunidades para la interacción el desarrollo de la lengua, el aprendizaje cooperativo y el escenario adecuado para dar lugar a la interculturalidad.
Atendiendo a estos conceptos es que buscaremos la forma de que los niños se expresen a través de actividades motivadoras y significativas, cercanas a su mundo y a su entorno, en las que el componente afectivo, el respeto por los ritmos de aprendizaje y la personalidad de cada uno de nuestros estudiantes, construyan un aprendizaje autónomo y participativo.
Hoy les dejo una idea que puede ser adaptada a cualquier contexto de aula, en la que el niño usará su personaje para comunicarse sin miedos ni inhibiciones, jugando, creando y hablando.
Materiales necesarios:
cartulina para el cuerpo del muñeco
papeles de colores para decorar
lanas o hilos para el pelo
pegamento y tijeras
ojos de plástico, móviles en lo posible
ganas de divertirse haciendo, lo más importante.
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